Que levante la mano quien no tenga suficiente espacio en el clóset. Aunque a menudo nos encontremos con la sensación de no tener nada que ponernos mientras contemplamos un armario a reventar de ropa. Porque, no todos hemos sido bendecidos con gran clóset/vestidor. Y cuanto más pequeño es el armario, más difícil es mantenerse organizado. Pero hay muchas herramientas de organización y trucos de estilo que pueden ayudar.
Consigue un colgador de ropa
Para todos aquellos que ya tienen el armario lleno hasta el tope o que ni siquiera tienen un armario, un colgador de ropa independiente es un salvavidas. Además, al tener la ropa a la vista, te obligará a tener la ropa bien organizada en lugar de amontonada en el clóset.
Esconder objetos detrás de las puertas de cristal
Si tu armario tiene puertas de cristal o no tiene, cúbrelas con una tela bonita. Esto ocultará toda la ropa que tengas guardada y añadirá un poco de estilo a tu espacio. Puedes utilizar velcro para sujetar la tela si no sabes coser.
Añadir almacenamiento bajo la ropa
Si tienes poco espacio, coloca una pequeña cómoda y un zapatero debajo de la ropa colgada. La parte superior de la cómoda puede albergar accesorios.
Reorganizar por temporadas
Guarda todos los artículos que no son de temporada debajo de la cama o en lugares difíciles de alcanzar en tu armario. Esto puede no ser conveniente para los artículos de uso diario, pero es perfecto para las maletas adicionales o la ropa fuera de temporada.
Muchas personas tienen ropa que sólo usan durante una parte del año, dependiendo de la temporada. Y no hay razón para tener ropa fuera de temporada saturando tu pequeño armario si no la vas a usar durante meses.
Si tienes un espacio de almacenamiento extra, como un ático o debajo de la cama, coloca allí la ropa de fuera de temporada para liberar espacio en el clóset.
Utilizar ganchos correctos
El uso de ganchos de diferentes formas, tamaños y estilos puede arruinar los planes de organización mejor intencionados. Los ganchos no tienen por qué coincidir exactamente. Pero deben ser del mismo tamaño y tipo, para que se ajusten bien y no se enganchen entre sí.
Por ejemplo, si cuelgas algunos pantalones en ganchos con broches y otros doblados sobre ganchos normales, puede ser difícil contemplar el clóset y ver todos los pantalones a la vez para elegir uno. Además, las camisas grandes colgadas sobre ganchos pequeños pueden arrugarse más fácilmente. Y los ganchos a distintas alturas pueden dificultar físicamente la tarea de sacar la ropa del armario.
Cuando intentas arreglarte, lo último que necesitas es que la ropa se enganche entre sí, se caiga al suelo del armario o se pierda. Por lo tanto, opta por ganchos básicos con barra, que puedan servir para la mayoría de las prendas.
Utilizar estanterías modulares
Otra forma estupenda de hacer espacio extra para las cosas que no caben en el armario es un sistema de estanterías modulares en tu recámara. Guarda lo esencial y luego exhibe los objetos más bonitos a la vista para que sirvan de decoración. También puedes utilizar soportes para colgar los accesorios.
Ordenar por colores
Organizar tu ropa por colores no sólo te da un mejor punto de partida para poder encontrar fácilmente tu ropa, sino que también puede ayudarte a elegir las prendas que mejor combinan en un instante.
Instalar iluminación
Un armario reducido significa que será aún más difícil encontrar lo que buscas, pero puedes hacerlo más fácil instalando una luz. Las luces empotradas son las mejores cuando se trata de no ocupar espacio vertical, pero un pequeño candelabro o una lámpara adyacente también pueden ayudar.
Instalar puertas corredizas
Nunca más tendrás que pasar de un extremo a otro en busca de lo que necesitas. Las puertas corredizas le salvarán la vida, y son fáciles de instalar. Ahorran mucho espacio, sobre todo en rincones estrechos en los que dos puertas chocarían entre sí.
Obtener separadores de estanterías
Aunque los organizadores de zapatos son prácticos para guardar el calzado, también se pueden utilizar para artículos voluminosos, como suéteres, que no quieres que se estiren accidentalmente en un colgador. Enrollarlos en cestas también es una gran solución. También puedes utilizar un separador de estanterías para mantener las cosas apiladas intactas. Los laterales te permiten apilar los montones más altos sin temor a que tus suéteres se caigan y acaben en el suelo.
Los separadores, las cajas de almacenaje y los cubos pueden ser útiles para organizar un armario, pero hay que utilizarlos adecuadamente. Si tienes un clóset pequeño, evita los productos de organización innecesariamente voluminosos que ocuparán un espacio valioso. En su lugar, busca productos simplificados, como separadores de estantes planos, que se adapten al tamaño y la forma exactos de los artículos que necesitas organizar. De este modo, los productos maximizarán los metros cuadrados de tu armario en lugar de crear espacio muerto.
Depura tu armario
Si has guardado todas las prendas que has comprado y tu clóset es pequeño, es probable que no importe lo organizado que estés en teoría. En la práctica, es probable que tu armario sea muy difícil de mantener ordenado. El primer paso para organizar cualquier clóset es reducir su contenido. Con un armario pequeño, tienes un espacio mínimo con el que trabajar. Por eso es aún más importante deshacerse de la ropa que no te pones.
Antes de reorganizar el armario, haz una limpieza a fondo y decide quién se quedará con las prendas desechadas, ya sea un amigo, una organización benéfica, un refugio para personas sin hogar o una tienda de segunda mano. A continuación, organiza la ropa de forma estratégica por tipos, por ejemplo, asegúrate de colgar las prendas largas a una altura suficiente para que no se arrastren por el suelo. Para darle un poco de estilo, forra la pared del fondo con alguna tela o papel tapiz que sea atractivo.
Cuando tu armario es pequeño, puedes pensar que serás capaz de encontrar cualquier prenda con facilidad aunque no haya nada clasificado. ¿Cómo podrías perder un par de jeans en un clóset de un metro de ancho? De hecho, es bastante fácil hacerlo. Y puede ser aún más difícil encontrar una prenda determinada cuando la ropa está apretada en un armario pequeño en lugar de colgada en un gran vestidor.
Por eso es importante tener un sistema de organización del armario. Considera la posibilidad de clasificar la ropa por tipos (chaquetas, camisas, vestidos, etc.) y por colores dentro de cada tipo. En última instancia, la forma de organizar se reduce a las preferencias personales, siempre que sepas dónde está cada cosa.
